Probablemente, la Navidad sea una de las celebraciones más importantes y esperadas en todo el mundo. Sin embargo, cada lugar la vive de manera única, con tradiciones que reflejan su esencia cultural. Desde los mercados navideños más emblemáticos hasta paisajes naturales que quitan el aliento, algunos destinos logran capturar como ningún otro la magia de esta temporada. Hablamos de lugares perfectos para viajar en Navidad y experimentar la esencia de estas fiestas.
Si quieres disfrutar de un plan iluminado por la alegría de estas fechas, aquí te presentamos cuatro destinos increíbles que puedes explorar solo, en familia o con amigos.
- Belén, el lugar para vivir y sentir la historia de la Navidad
Esta es la ciudad donde nació el niño Jesús, un lugar que cada año recibe a miles de personas que se reúnen para conmemorar su llegada. Las celebraciones comienzan el último sábado de noviembre, conocido como el Primer Domingo de Adviento. Ese día, se encienden cuatro velas en la Gruta de la Natividad, el sitio donde, según la tradición, nació Jesús.
El 24 de diciembre, tiene lugar un peregrinaje de Nochebuena desde Jerusalén hasta Belén, que culmina con la emblemática Misa de Gallo, celebrada a las 23:30. Este es uno de los momentos más esperados por los fieles católicos. Si visitas Belén al viajar en Navidad, no puedes dejar de explorar lugares icónicos como la Iglesia de la Natividad y la Tumba de Raquel, ambos santuarios de gran importancia tanto en la religión cristiana como en la judía.
- Núremberg, para un plan con panoramas llenos de encanto
Esta es una de las ciudades alemanas donde el espíritu de la Navidad se vive con mayor intensidad. Al llegar, no dejes de visitar el famoso y emblemático Christkindlesmarkt, un mercado navideño con más de 180 puestos. Aquí podrás encontrar desde adornos festivos hasta deliciosas salchichas a la parrilla, aunque los productos artesanales son los protagonistas: cascanueces, árboles y ángeles decorativos.
No puedes perderte la oportunidad de disfrutar la gastronomía local y las curiosas artesanías hechas con alimentos, como el Zwetschgenmännle, un encantador «hombre ciruela» elaborado con ciruelas pasas. Para las familias, el Kinderweihnacht es una opción ideal. Este mercado navideño está diseñado especialmente para los más pequeños, y ofrece un ambiente mágico y actividades únicas. Además, sube al mirador de la Iglesia de Nuestra Señora, ubicada en la plaza del mercado central. Esta iglesia gótica, con su arquitectura singular, es uno de los principales atractivos de la ciudad.
- Roma, la magia navideña en la capital de Italia
Una de las primeras actividades que debes realizar al llegar a Roma es visitar sus mercados navideños. El más emblemático es el de Piazza Navona, donde encontrarás juguetes, artesanías y dulces típicos que capturan la esencia de la temporada. Otra parada imprescindible es el Vaticano, donde podrás escuchar el mensaje del Papa. El famoso Urbi et Orbi se pronuncia en la Ciudad del Vaticano al mediodía del 25 de diciembre. Este evento es gratuito y atrae a miles de personas de todo el mundo, creando un ambiente único e inolvidable.
Recorre la ciudad para disfrutar de las iluminaciones navideñas que decoran el centro histórico. Algunas de las calles más decoradas son Via del Corso, Via Cola di Rienzo y Via Ottaviano. Además, esta época es ideal para capturar una clásica foto junto a un monumento histórico, ya que suelen colocar árboles navideños en estos lugares. Por ejemplo, junto al imponente Coliseo Romano encontrarás un árbol que añade un toque festivo a este ícono de la ciudad.
- Islandia, entre tradiciones y aventuras inolvidables al viajar en Navidad
En Reikiavik, Islandia, la Navidad se vive de manera única, marcada por sus propias tradiciones y un fascinante folklore. El 23 de diciembre se celebra la Porlakmessa, o Misa de San Þorlákur, durante la cual es costumbre disfrutar de un plato típico: Skata, un pescado fermentado acompañado de papas hervidas.
Un aspecto especial de las festividades navideñas islandesas es la leyenda de los 13 Yule Lads, personajes parecidos a Santa Claus que visitan a los niños, añadiendo un toque mágico y único a las celebraciones. Entre el 24 y el 26 de diciembre, la mayoría de comercios y atracciones permanecen cerrados debido a los días festivos. Por ello, estos días son ideales para disfrutar de actividades al aire libre, como explorar cascadas, relajarse en manantiales termales o admirar los impresionantes volcanes de la región.
Diciembre es también una excelente época para deleitarse con los paisajes invernales y disfrutar de un espectáculo natural inolvidable: las auroras boreales. Si buscas aventuras aún más emocionantes, puedes recorrer el país y realizar excursiones a glaciares o explorar las asombrosas cuevas de hielo en Skaftafell o Jökulsárlón.
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