Descubrir los sabores de la ciudad es un plan fascinante, lleno de momentos gloria y grandes decepciones. Sin embargo, siempre será una vivencia estimulante. A continuación, recomendaciones para viajeros gastronómicos nacidas de la experiencia, para quien desee saborear lo mejor del mundo.
1. CONCÉNTRATE EN UN TEMA EN ESPECÍFICO, ESO FACILITA CUALQUIER RECORRIDO. Toda excusa es buena, una película, un libro, un hecho religioso, lo importante es tener claro qué deseamos lograr buscar y enfocarse. No hay temas malos ni buenos, acertados o inciertos, cursis, ridículos o excepcionales. Solo hay lugares que responden a tu interés.
2. EVITA COMPARAR Y MUESTRA RESPETO A LAS DIFERENCIAS. Cuando se compara siempre hay alguien que sale perdiendo. Al momento hacer un recorrido, intenta no comparar con tu casa, tu país o tu cultura, entiende que, entre tantos millones de seres humanos, son infinitos los modos de ver el mundo y de asumirlo.
3. MANTÉN LA MENTE ABIERTA. El prejuicio limita más que un defecto físico o la falta de dinero. Dejamos de aprender y hacer descubrimientos, por el solo hecho de cerrarnos a lo nuevo. La información puede proceder de los lugares insospechados, desde recomendaciones escritas, cuentos de amigos o conocedores, películas, redes sociales, inclusive en la barra de un bar.
4. NO TE DEJES LLEVAR POR LAS APARIENCIAS Y ESCUCHA TU INTUICIÓN. No dejes de entrar a un lugar porque te parezca fea la decoración o porque no luce suntuosa. Eso sí, escucha tu intuición si un lugar no te da buena vibra, simplemente pasa de largo.
5. EL PRECIO NO ES SINÓNIMO DE CALIDAD. Si el precio es alto no significa que sea bueno y viceversa. Aquí no hay nada determinante, más allá de probar según las medidas de las posibilidades y gustos de cada quien.
6. ESCOGE EL LUGAR MÁS CONCURRIDO. Aquella creencia de que si un lugar está lleno es por algo, nunca fue tan cierta.
7. ¡DÉJATE SORPRENDER! CONTAGIA A OTROS! No pierdas tu capacidad de asombro, la alegría del descubrimiento es estimulante, descubrirás que no hay lugar, ni persona aburrida en el mundo. Solo hay que saber mirar.
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